Aprender a ser viejo...

Famosa pintura de autor anónimo

Aprender a ser viejo, pero no p…

Jorge Hinestroza 

Maracaibo, febrero 5 de 2024.

No me importa que me digan que estoy chocho. Pero tengo que aprovechar mi supuesta chochera para decirle la verdad a cualquiera.

Al fin tengo libertad de expresión, la única broma es que ya nadie me presta atención. Los viejos estamos invalidados, en el preciso momento en que nuestra experiencia se puede hacer valer. 

como contrapartida los jóvenes cuando ven un viejo se ponen arrogantes como un gallo.

Después de haber perdido mi tiempo echándole pestes a la gente por escribir en "poesía", por andar tirando indirectas, o hablando en jerigonzas, ahora me veo haciendo lo mismo. 

Pero, como digo yo: es primera vez que soy viejo, y pendejo.

La única ventaja de ser viejo, es que puedes jugar dos cartas: hacerte el tonto o parecer chocho pa'que crean. Tu escoges…

Entremos en materia. Cuando yo era niño, los grandes se hacían los pendejos. En los carnavales de febrero, a quienes se disfrazaban de "negrita", se le gritaba "viejo-viejo-viejo" entonando una voz fingida. Si naciste  "baby boomer"  y  no has sido un introvertido asperger,  te debes acordar. No te hagas el p.....

<<¿viejo-viejo? y ¡Negritaaaa!>> vamos a estar claro son dos formas de invalidar o descalificar a la gente. Una por la edad y otra por el color de la piel. Repara en esto: le gritan viejo a “las negritas” lo negro, para muestra ese botón…

Aquello de que “yo le digo negrito por cariño” …será la única forma de usar esa palabra por auténtico aprecio, pero no es mentira que el diminutivo se utiliza para soslayar o disimular un poco el desprecio racial, ¡poné cuidao pa’que viais!

Antes de continuar mi perorata, diré lo que sentí recordando mi niñez en tiempo de carnavales: me emocioné mucho viendo en mi cabeza la película  de aquellos momentos que ahora llevan una frase de moda: "éramos felices y no lo sabíamos" eso lo dicen ahora los "beibibumeros". De pana.

Detrás de aquel 'disfraz de negrita" pude observarse a algo… He estado reflexionando sobre el racismo en Venezuela. Fíjate.

Preocupado por lo que pasa en Haití y en la misma África con las matanzas entre las tribus. ( le doy gracias al creador por haber nacido en Cabimas, por cierto). por fortuna en Venezuela no es que no haya racismo sino que no llega al negricidio, como en gringolandia.

Pero no puedo pensar en las pavorosas zonas de hambre del mundo, como África, porque inmediatamente me pongo a pensar cuán fácil es resolver el hambre en el mundo, solo con acabar con la guerra. Bueno, me refiero: plata hay. o sea, con esto le respondo a que “no hay presupuesto”. Yo hablo de respuestas estratégicas.

He creido descubrir que mas de la mitad de los conflictos mundiales—cuidado y si nó más aún, obedecen a lo que le venga en  ganas a la industria bélica mundial, que está cujiando (azuzando) las guerras y haciendo mucho billete con la fábrica de armas de todos colores y tamaños. 

Tanto es así, que me huele que detrás de la “competencia entre el socialismo y el capitalismo” de los poderosos del mundo, están los sinvergüenzas mataniños de la industria armamentista. ¡Es que la crisis es mundial, y se ve de bulto que también está afectando a China, y parece ser la salida favorita para los “expertos en desarrollo” (quienes no hablan de eso en público), buena parte de quienes sin duda, son los mismos expertos de la industria de la paz. Negocio es negocio. Si no es así, que me perdone Dios, pero es lo que pienso.

no

Y, como es de esperar, observando los algoritmos (que se “dibujan” en los mapas globales de la guerra)  se puede ver que allí detrás hay una "mano pelua", la misma de aquellos “hombres de negro” en cuyo portafolio están los planes de la guerra, representante de las grandes industrias militares Lockheed Martin, Raytheon, Boeing, Northrop Grumman y General Dynamics. dicho sea de paso, las estadísticas Chinas no se ofrecen al público… pero no es traído por los cabellos que China sea la primera fabricante mundial de armamento, y no es para regalar. Cuando más, se dan en créditos “blandos”. No es difícil llegar a esa conclusión.

En conclusión, Venezuela es un país privilegiado, y especialmente el Zulia donde la gente, —bueno  la de la generación del 45 al 50, si el vecino no tiene que comer los demás le comparten…